Indignante

Lo siguiente es un texto que ha comenzado a circular por las redes en el día de hoy, sí, justo hoy que en Córdoba se registraron 4.360 nuevos casos y 40 personas fallecidas. Sí, justo cuando salieron agrupaciones de padres para pedir volver a las escuelas, como si los muertos no existieran, las enfermedades fueran una construcción subjetiva y las secuelas, puntos de vista sobre la vida.
La carta de un médico lo dice todo y nos deja un vacío que solo se calma con una conducta empática que invite a preservar la vida.

José Fernández

“Una de esas pacientes del Domingo Funes fue derivada a Jesús María por falta de cama en la terapia de Punilla. Llegó en shock irreversible y una hora después decretamos su muerte aunque prácticamente entró muerta, con los signos vitales difíciles de valorar.
Cuando llamamos al teléfono de los familiares para comunicarles la situación, nos atendió un chico quien sin poder dejar de llorar nos dijo que hiciéramos todo lo posible por salvarla, porque era su tía, porque su mamá y su abuela también estaban graves y porque si se morían él se quedaría sólo, sin tener a quien acudir.
Mi compañero de guardia hizo un esfuerzo para no llorar a la par de este chico y, piadosamente, le dijo que estábamos haciendo todo lo posible para salvarla, algo que evidentemente no sucedió.
Cosas como estas suceden todo el tiempo. Antes los niños y las niñas se quedaban sin sus abuelos y ahora se están quedando huérfanos. Creo que este es verdadero Código Rojo. El código de una sociedad exhausta.
Entiendo que debemos ser solidarios y trabajar por la contención de tanta gente indefensa, pero también por la rebeldía. El gobernador se opera y encuentra una cama vip, mientras los más necesitados mueren como perros.
Es insultante”.