¡Con las vacunas NO!

El Gobierno de Venezuela denuncia a COVAX, por no cumplir acuerdos de provisión de vacunas.

EL sistema COVAX se presentó en el mundo como una iniciativa de la Organización Mundial de la Salud para facilitar el acceso de los países mas pobres a las vacunas necesarias para enfrentar a la pandemia de coronavirus. Entre los principales aportantes de esta iniciativa se encuentra la Fundacion Gates que ha manifestado su preocupación por promover la “igualdad sanitaria mundial”
La Bill & Melinda Gates Foundation ocupa el segundo lugar como financista de la OMS con $531 millones de dolares anuales, que representa un 9,4 % de los aportes totales. Solo es superada por Estados Unidos que aporta 893 millones. El Reino Unido completa el podio de los sponsors de la institución. Distintos analistas han planteado su preocupación de la influencia política que podrían tener estos pesos pesados de los aportes en las decisiones de la OMS, y en el sistema COVAX.
Lawrence Gostin, director del Instituto O’Neill de Derecho de la Salud Nacional y Mundial de la Universidad de Georgetown, en Estados Unidos, expresa sus dudas por la influencia que pueden tener los aportantes privados : “La mayor parte de la financiación que Gates ofrece a la OMS está vinculada a programas específicos de la fundación. Esto significa que la OMS por sí misma no puede establecer las prioridades sanitarias mundiales y está en deuda con un actor privado que, en gran medida, no rinde cuentas. A diferencia de los Estados, la Fundación Gates tiene poca responsabilidad democrática”.
Esas influencias son seguramente la mejor explicación de los hechos denunciado ayer domingo por el presidente Nicolás Maduro de que ““El sistema Covax le ha fallado a Venezuela; nosotros le cumplimos, haciendo magia para desbloquear recursos que nos tenían bloqueados”. El país caribeño cumplió con el pago de 120 millones de dólares y las vacunas nunca llegaron.
Otros gobiernos, como el de Cuba, sometidos a bloqueos y sanciones por parte de Estados Unidos, han venido denunciando en distintos organismos internacionales, que la política de sanciones no se ha detenido siquiera frente a la emergencia de la pandemia.
Venezuela, un país con 30 millones de habitantes, tiene una cifra total de contagios de 277.000 y alrededor de 3.200 muertes. Ha vacunado al 11% de la población., con las vacuna Sputnick V, Sinopharm y Abdala. Esta última vacuna fue creada y producida en Cuba.
La exigencia del gobierno de Venezuela de que “o nos mandan las vacunas o nos devuelven el dinero”, ponen a Bill Gates y su fundación en una situación expuesta. Alguien podría pensar que quienes se presentan como grandes filántropos de la humanidad son vulgares estafadores.