Bajó la producción hidroeléctrica en el país por la sequía y falta de nieve
9Ago21Crisis hídricas en las cuencas del Paraná, del Comahue y Cuyo. Restricciones estatales a las operadoras de las presas. Medidas de emergencia de la Nación por la bajante histórica del Paraná y de Neuquén para su provincia.
Cualquiera sea el comportamiento del clima los próximos meses, difícilmente se revierta la crisis hídrica antes de ocho meses, de acuerdo a las informaciones y análisis de la emergencia en el noroeste del país como en la Patagonia y Cuyo. Los alcances de la emergencia son importantes en la producción agropecuaria, consumo humano y el transporte en el caso de las cuencas de los ríos Pilcomayo, Paraná y Uruguay. En el caso de los ríos Limay, Neuquén y Negro el impacto ya llegó a la producción de electricidad del complejo de cuatro presas. El impacto mayor será con las altas temperaturas del próximo verano, tanto para la generación de energía para el sistema interconectado como para el aumento de riesgos de incendios y la falta de humedad para las pasturas naturales.

La Autoridad Interjuridiccional de Cuencas (AIC) reasumió el control estratégico del uso de agua de las presas ubicadas sobre los ríos Neuquén (Planicie Banderita) y Limay (Alicurá, Pichi Picún Leufú, Piedra del Aguila y El Chocón-Arroyitos) para garantizar el suministro para el consumo humano, el riego de la producción agropecuaria y la industria. Con esa resolución tomada el 23 de julio, el gobierno de Neuquén dictó hoy la emergencia hídrica por seis meses. Por el mismo plazo es el decreto nacional dictado por la cuenca del río Paraná, que afecta a Formosa, Chaco, Corrientes, Santa Fe, Entre Ríos, Misiones y Buenos Aires, sobre las márgenes de los ríos Paraná, Paraguay e Iguazú https://www.boletinoficial.gob.ar/detalleAviso/primera/247302/20210726.

Ya redujeron al 50% la capacidad de generación de energía, respecto a la misma fecha del año anterior, Yacyretá, sobre el río Paraná; Salto Grande, sobre el río Uruguay; y el Chocón sobre Limay, según datos de la secretaría de Energía de la Nación https://www.telam.com.ar/notas/202108/564339-bajante-de-rios-represas-hidroelectricas.html.
El Servicio Metereólogico Nacional (SMN) publicó dos mapas https://www.smn.gob.ar/noticias/sequ%C3%ADa-y-falta-de-nieve-en-patagonia-y-cuyo que documentan el cuadro severo producido por sequías más intensa en 77 años en el caso de la cuenca del Paraná y consecutiva de 12 años en la cuenca del Comahue. La cordillera de los Andes presenta este invierno para el área de Cuyo la superficie cubierta por nieve más baja desde el 2000,lo mismo que para la Patagonia norte. En este último caso, el año pasado fue totalmente opuesto, con nevadas por sobre las medias que provocaron gran mortandad de animales, pérdidas materiales y de infraestructura, así como de vidas de pobladores.
Medidas precautorias
“De acuerdo a las previsiones meteorológicas en el trimestre agosto-octubre no hay indicios de que se puedan revertir los bajos niveles de lluvia en la cuenca de los ríos Paraná y Uruguay; algo similar a lo que es espera en el sur del país, en particular en la cuenca del Comahue”, indicó el SMN.
Elias Sapag, neuquino, de la AIC, informó la decisión del organismo interjuridiccional por la que reasume el control del manejo de los caudales de agua concesionadas por contratos a grupos privados. La Nación estuvo de acuerdo en la decisión aunque todavía no hubo pronunciamiento de las gerencias de las operadoras. A diferencias de las presas del norte –que son de paso-, las del Comahue son de altura y permiten almacenar agua para garantizar su provisión aguas abajo. La nieve y las lluvias registradas en el trimestre mayo-julio fueron insuficientes para reponer el déficit de humedad, en lo que se fundamentó la decisión del organismo. “Sino no llegamos a abril, cuando se renueva el ciclo hídrico”, advirtió.
Estos resguardos protegen los intereses de la vida aguas debajo de las presas. No así la de áreas marginales muy afectadas como el noroeste de Neuquén, con crianceros trashumantes que sufrirán los bajos caudales del deshielo; y la línea sur de Río Negro, con escasa agua dulce superficial.


Susana Lara