Un triunfo, la clasificación en el bolsillo y poco más
15Oct21
La selección argentina se impuso con justicia en un partido discreto, frente a un devaluado Perú.
Tablón Argento
Los pronósticos previos auguraban un amplio y lúcido triunfo de la selección argentina, frente a un equipo peruano que no está pasando su mejor momento futbolístico y llegó al partido con ausencias importantes como las de Paolo Guerrero, André Carrillo y Luís Advíncula. Quizás por eso el técnico Gareca salió con un planteo conservador, con un solo delantero, el italo peruano Gianluca Lapadula. A los 8 minutos de juego ese pronóstico pareció confirmarse cuando Cristian Romero convirtió de cabeza un gol, que sería posteriormente anulado por fuera de juego. Argentina no mostró las lagunas defensivas que evidenció en los primeros treinta minutos con Uruguay, y se mostró sólido en el control de la pelota. La concentración de defensores y mediocampistas peruanos cerraban el ingreso por el centro del área y obligaron a tratar de llevar el juego a los laterales. Allí empezaron los problemas porque Angel De María que entusiasmó en los primeros minutos con un par de corridas y un caño que humilló a un defensor peruano, le quitaba espacio al Huevo Acuña que no tenia a nadie a quien marcar. Por el lado derecho las cosas no mejoraban con un Nahuel Molina muy impreciso, que parecía empeñado en entregarle la pelota a sus rivales. En el rombo de medio juego De Paul y Paredes aportaban marca y paciencia para buscar un hueco que permitiera quebrar a la defensa peruana, mientras Lionel Messi se empeñaba en ingresar en un espacio muy poblado de piernas peruanas y Lo Celso no conseguía entrar en sintonía. Para colmo de males Lautaro Martínez, al que no le llegaba la pelota pero seguía rondando el área con su presencia amenazante, recibió un pisotón del arquero Gallese, que lo dejó muy golpeado. De todas maneras la selección llevó riesgos al área peruana con dos disparos cruzados de De Paul y De María que pasaron frente a las barbas de Pedro Gallesse sin que nadie pudiera empujar a la red. Lo único que ofreció Perú fue un tiro libre recto y muy cercano al arco que desvió Dibu Martinez con su solidez acostumbrada.
El gol se produjo por una jugada sorpresiva, porque después de largos minutos en que Molina no recibía la pelota de sus compañeros fue amnistiado por un pase de De Paul y su centro perfecto encontró la cabeza de Lautaro Martinez que definió con la contundencia que se le pide a un gran goleador.
El segundo tiempo empezó con pronóstico de goleada pero nada de eso pasó. Argentina siguió controlando el juego pero pareció conformarse con un 1-0, que era un resultado corto. Y a los 62 minutos de juego casi se nos paraliza el corazón cuando el ingresado Jefferson Farfán se le escapó a Romero y se tiró ante la salida de Martínez. El arbitro brasileño Wilton Sampaio, que parecía empeñado en convertirse en protagonista, cobró un penal de fantasía y la ejecución quedó a cargo de Yoshimar Yotún. No se sabe si fue porque el Dibu Martínez le achicó el arco, o porque ese gol hubiera sido una injusticia, pero lo cierto es que el remate pegó en el travesaño y se fue por arriba. Los cambios de los muy cansados Paredes y De María oxigenaron a la selección nacional, que tuvo la oportunidad de un tiro libre de Messi que desvió el arquero Gallesse y un gol de Guido Rodríguez, mal anulado porque Sampaio le cobró mancha en la jugada previa. En resumen, la selección ganó con justicia, pero sin lucir y sufriendo sobresaltos innecesarios, agravados por la actuación de un árbitro que inventó un penal y anuló un gol legítimo. De Paul volvió a ser la figura del equipo, Lautaro Martinez cumplió con lo que se le pide a un goleador y el Dibu Martínez sigue agrandando su leyenda frente a las ejecuciones desde los doce pasos.
Con este resultado tenemos más de medio boleto a Qatar. Ojalá esa tranquilidad le quite presión al cuerpo técnico y a los jugadores, para volver a disfrutar del fútbol bonito que puede brindar esta selección.
Tablón Argento.