El ARA San Juan y el vuelo del imputado
16Nov21Ayer se cumplieron 4 años del hundimiento del submarino ARA San Juan en el que murieron 44 tripulantes, también ayer, el imputado Mauricio Macri voló rumbo a Arabia Saudita.
Hace cuatro años desaparecía el submarino Ara San Juan, del que todavía no se precisan los motivos reales del hundimiento, siendo el argumento, que producto de una avería se inundó la sala donde estaban las baterías, lo que produjo la supuesta implosión que cobró la vida de los que quedarán en el imaginario social como los 44.
Una semana después llega el comunicado de los Estados Unidos que decía que una “anomalía hidroacústica” se había detectado después de la última comunicación efectuada desde el submarino.
El vocero de la Armada argentina, Enrique Balbi anunciaba que la información recibida del país del norte, había sido chequeada y sometida a análisis que daban cuenta de que se trataba de “un indicio oficial que corresponde al miércoles 15 de noviembre (2017) por la mañana (argentina) coincidente con el área de operaciones de la última posición registrada por el submarino”.
Pocos días después aparece el aporte dado por el ex comandante del buque Cabo de Hornos de la Armada chilena, César Miranda: “había pasado la información de la localización del naufragio, 11 días después de su desaparición, lo que queda confirmado cuando la localización que realiza, efectivamente, el Ocean Infinity, es la misma”.
La información del ex capitán chileno quedó confirmada cuando el entonces contraalmirante de la Armada Argentina, Enrique López Mazzeo, declara ante la Cámara Federal de Apelaciones de Comodoro Rivadavia, que el buque Cabo de Hornos había dado con la ubicación del San Juan 20 días después de su desaparición. Incluso en esa misma audiencia, López Mazzeo afirmó que si se revisa toda la documentación se podrá observar que cuando firmó “el cierre del caso SAR (por la búsqueda y rescate)” ya tenían “detectada la posición del submarino” y por eso habían “coordinado con la Marina Británica el 5 de diciembre (de 2017) el pedido de un vehículo autónomo”, tal como decíamos en Tramas.
Lo que siguió es lo que está en los respectivos juzgados que vinculan las diferentes causas que confluyen en la muerte de los 44 submarinistas.
A 4 años del hundimiento, cumplidos el día de ayer, el imputado de espionaje ilegal a los familiares, Mauricio Macri, viajó a Arabia Saudita luego de haber obtenido el permiso del juez Martín Bava, subrogante en el Juzgado de Dolores y a quién recusó por segunda vez, la primera no prosperó pues la Cámara Federal de Mar del Plata no había encontrado motivos y en esta segunda recusación debe expedirse nuevamente, posiblemente el miércoles 17 o tal vez se tomé unos días más.
Entretanto el príncipe de Arabia Saudita habría invitado a Mauricio Macri, quien partió ayer lunes a las 14,30 después de haber recibido la autorización judicial en un vuelo de Air France con destino París y de allí continuar el viaje al destino que notificara su abogado, Pablo Lanusse.
La abogada por la querella mayoritaria, Valeria Carreras, le presentó un escrito al juez Bava en donde señalaba que había habido ocultamiento de información sobre el viaje de Macri puesto que también iba a ir a Qatar, cosa que no fue debidamente informado por la defensa, que luego presenta un manuscrito indicando ese destino como “escala”.
Más allá de los ocultamientos de información, o a los relatos inconsistentes y bravuconadas del que se sabe impune; lo que hizo Macri fue “volar” de las 44 muertes que ya no puede soslayar, puesto que no sólo está la imputación por el espionaje ilegal sino el ocultamiento durante un año de la localización del hundimiento, confirmado en las declaraciones de Enrique López Mazzeo en la Cámara de Apelaciones de Comodoro Rivadavia.
Mientras los familiares esperan la resolución de los camaristas Alejandro Tazza, Eduardo Jiménez y Santiago Martín, los mismos que no hicieron lugar a la primera recusación; el imputado Macri vuela a los desiertos empetrolados de las monarquías absolutas.
Darío Balvidares
Foto destacada: El litoral