Carmelitas descalzas denuncian al arzobispo de Salta por violencia de genero

Carmelitas descalzas denuncian al arzobispo de Salta por violencia de genero

21Abr22 0 Por Tramas

El Arzobispo Mario Cargnello y otros dos sacerdotes fueron denunciados por tres monjas de la Congregación Carmelitas Descalzas por hechos de violencia de género, psicológica, física y económica. Como medida cautelar la justicia puso custodia policial a las 15 religiosas y se prohibió a los acusados acercarse a 300 metros al Convento San Bernardo donde viven las denunciantes.

Lo sorprendente de los hechos denunciados por las monjas en Salta, no es que hayan ocurrido, sino que hayan tomado estado público. Durante siglos la Iglesia Católica se ha preocupado por barrer bajo la alfombra hechos bochornosos ocurridos en sus espacios institucionales. En los últimos tiempos han salido a la luz denuncias muy graves contra religiosos por abusos cometidos contra seminaristas o internos de colegios. Quienes denunciaron, fueron las propias víctimas, años después de haber transitado por estos espacios eclesiásticos.

La denuncia realizada por las monjas de Salta, que involucra al Arzobispo y a los sacerdotes Lucio Ajalla y Martín De Elizalde, surge de personas que siguen siendo parte de la estructura eclesiástica, y de quienes tienen menos poder, que son las mujeres religiosas. En particular, las Carmelitas Descalzas, como otras monjas de clausura, no se hacen conocer por sus reclamos o denuncias. Han consagrado su vida al silencio, la oración, la penitencia y el trabajo. Han hecho votos de Pobreza, de Castidad y también de Obediencia. Tienen una vida austera y sencilla, concentrada en la contemplación y la oración. Para salir del convento deben contar con un permiso especial de su Superiora, si tienen que estar internadas en un Hospital, deben estar en una habitación sin contacto con los demás pacientes. Las monjas del convento de San Bernardo no reciben apoyo económico del Arzobispado y se sustentan con la venta de rosarios, algunas artesanías, cosas dulces, panes y libritos de devoción.
Las religiosas denuncian que estos hechos de violencia son de larga data, desde que asumió el arzobispo Cargnello en 1999. La abogada Claudia Zerda Lamas, que defiende a las carmelitas preciso que: ” Hay una relación de abuso de poder y en este caso puntual se dan los elementos tipificados para realizar la denuncia” .Y agrego que: “En otro momento era impensable hacer tal vez estas denuncias pero el hostigamiento sufrido hace que esas personas vean afectada su vida diaria”.