Agricultura regenerativa. “Nos vinculamos de una manera diferente con la naturaleza”
3May22 0 Por Nora TamagnoDesde hace bastante tiempo, frente a los fuertes impactos negativos que se le reconocen al modelo agropecuario industrial, se presenta a la agroecologia como una alternativa de producción saludable de alimentos.
Más recientemente se empezó a hablar de producción regenerativa. Para conocer más sobre esta corriente conversamos con el Ing. Agrónomo Agustín Barbera, quien trabaja en la Chacra Experimental Integrada de Barrow (INTA-MDA), que mantiene un módulo agroecológico hace 10 años, acompaña desde hace 5 años a productores agropecuarios en la transición agroecológica e integra el grupo Escuela de Regeneración.
Tramas (T): ¿Qué es la Escuela de Regeneración? De qué se trata la agricultura regenerativa y cómo se vincula con la agroecología?
Agustín Barbera (AB): La Escuela de Regeneración es un espacio que conformo y participo, es una comunidad de aprendizaje, somos un grupo de personas en su mayoría jóvenes que venimos de diferentes disciplinas, de diferentes corrientes pero que todas ellas buscan reconciliarnos un poco con la naturaleza, vincularnos de manera diferente con el entorno. Hay gente que viene de la agroecología como es mi caso, hay gente que viene del trabajo con agroecología en sistemas más intensivos, de las huertas y las granjas, hay quienes vienen de la ganadería regenerativa, del manejo holístico, de la permacultura. Hay gente con diferentes bagajes y que en definitiva todos buscamos vincularnos de una manera diferente con la naturaleza a diferencia del modelo industrial de producción. Esta comunidad de aprendizaje o conjunto de personas que nos juntamos en la Escuela de Regeneración, nace de abrazar un poco esas corrientes y entendiendo que todas buscan lo mismo. A veces se han dado algunos debates y generalmente se sienten rispideces entre agroecología, orgánico, o alguna otra corriente más, y que cada una tiene sus diferencias quizás, o a veces sólo una diferencia de la palabra, porque al fin y al cabo lo que importa es que se busquen abordar los procesos de una manera similar, más allá del nombre que tiene la disciplina. No queremos entrar en esos debates, o sí los debates, pero no en eso de señalarnos con el dedo o encontrando grandes diferencias entre nosotros, sino abrazando un poco todas. Lo que buscamos es la regeneración de los sistemas, es decir que los procesos del agroecosistema funcionen lo mejor posible, los reciclados de nutrientes, la fertilidad del suelo, que no se produzca la pérdida de nutrientes, que nos se produzca la pérdida de recursos, que contemplen a las personas dentro. Más allá de que a veces se siente, o en algunos debates se escucha que por ahí la agricultura regenerativa sólo trata prácticas ecológicas, eso no es tan así. Está muy presente la práctica social también, importan las personas dentro y fuera de los predios. Parte de abrazar todas las disciplinas y no contarnos las costillas entre nosotros, sino buscar entre todos las sinergias que pensamos para poder tratar de cambiar un poco el modelo este que tenemos.
En definitiva la Escuela de Regeneración tiene como tres ejes: la educación, la producción y la comunicación. Se van articulando y generando cursos de educación en Agricultura regenerativa con sus diferentes temáticas y en diferentes sistemas. En la producción tratamos de acompañar y evidenciar que hay un montón de sitios productivos que están haciendo agricultura regenerativa, que si bien tienen el foco en regenerar el suelo y el ambiente, también tienen foco en que a través de eso se regeneren las personas. En la parte de comunicación tratamos de comunicar sobre todo mediante redes, todo lo que se puede generar y todo lo que se está haciendo.
T: Cuáles son los principios en los que se basa a Agricultura Regenerativa? Y cuáles son las principales diferencias que tiene con la agricultura industrial, basada en el uso de insumos externos (fertilizantes, semillas híbridas u OGN y agrotóxicos)?
AB: La agricultura regenerativa tiene algunas bases concretas, en definitiva lo que buscamos es la cooperación en la naturaleza, se asemeja muchísimo a los pilares de la agroecología y quizás rescata algunos otros, pero son similares. Se busca la cooperación, las sinergias, entender que para los sistemas naturales, gran parte de los procesos tienden a la perennidad. Entonces si bien entendemos que en algunos sitios y en algunos sistemas los cultivos anuales y la producción de especies anuales es importante, comprender esa perennidad nos ayuda a tomar decisiones y eso va de la mano de la sucesión ecológica también. La prennidad en los vínculos, no sólo la perennidad ecológica, sino también la prennidad social es muy importante. El principio es la perennidad y se aplica tanto a las plantas, al suelo, al ecosistema como a las personas. También es muy importante entender los procesos del agroecosistema, los ciclos del agua, los ciclos de nutrientes y las dinámicas de las poblaciones. Y entre todos ellos tratar de generar sinergias y cooperación. Además, va de la mano del holismo, que va más allá de las decisiones ecológicas de un agroecosistema, sino que también involucra a las personas que están dentro y vinculadas a ese agroecosistema.
T: La agricultura regenerativa se complementa con prácticas ganaderas que tengan principios equivalentes?
AB: Sin dudas que como en la agroecología la vinculación y la articulación con la ganadería es un pilar muy importante para la agricultura regenerativa, por el hecho de diversificar producciones, de reciclar nutrientes, por el hecho de que mediante la ganadería se pueden lograr muchas sinergias y potenciarse el reciclado de nutrientes, y además, se pueden generar un montón de prácticas de control de especies espontáneas y de algunos tipos de procesos que sin la ganadería a veces es más complicado y por supuesto que potencia todo este trabajo. De todas maneras, como pasa en la agroecología, no hay recetas y no hay una estructura que limita, sino que se tendría que adecuar a cada sitio; y hay muchos sitios que hoy no cuentan con ganadería, y en el corto plazo no podrían contarla, en esos casos hay un montón de procesos que se pueden generar para lograr una regeneración.
T: La agricultura regenerativa es una alternativa sólo para las y los pequeños productores o puede aplicarse a gran escala productiva?
AB: Sin dudas que la agricultura generativa no tiene escala, sino que se puede aplicar a cualquier tipo de sistemas, sobre todo porque lo que se repiten son los principios. Por eso se complementa y articula mucho con la agroecología. Es similar, no hay escala determinada y los principios se pueden aplicar a cualquier sistema.
T: Desde tu práctica profesional, cómo aportas a la difusión de este modo de producir?
AB: Desde mi práctica profesional yo trato de comunicar y contar y explicar todo lo que se trata de hacer y lo que estamos haciendo en muchos sitios. Pero sobre todo, me parece que la mayor comunicación se hace con el “haciendo”, comunicando lo que se hace en definitiva, ya que es muy importante para todos nosotros ver los campos, ver los cultivos, ver el suelo y ver los procesos que se están dando.
T: Cómo ves la adopción de la agricultura regenerativa entre los productores de tu zona y de la Argentina?
AB: Tanto con la agroecologia y como con la agricultura regenerativa hay una creciente demanda, muy grande últimamente, en los últimos años. Pero aún sigue siendo muy incipiente para el universo de productores y personas que están en el modelo agropecuario. Veo que hay un crecimiento exponencial pero es aún minúsculo en relación a todo el resto.
T: Esta coyuntura planetaria de crisis global, económica y energética, puede ser una oportunidad para difundir estas prácticas de producción regenerativa?
AB: En algún punto creo que la crisis climática potencia todas estas disciplinas ya que por un lado la conciencia social aumenta con respecto a los problemas climáticos que estamos teniendo y las comunicaciones y la información que hay dando vueltas. Y la gente, ya sea la sociedad civil o urbana y el sector agropecuario, va generando la conciencia de que algo está pasando y tenemos que cambiar. Si bien no son grandes determinantes para el cambio, un poco de la conciencia va modificándose. Pero sobre todo, lo que más veo es que, en los últimos años, en los que el clima está más errático, con más sequias o en algunas zonas con más inundaciones, el modelo actual de producción que tiene tanto uso de insumos y sus costos muy elevados, también pone en riesgo a productores que están manteniendo este sistema. Hay muchos productores que se ven muy vulnerables con la crisis climática y por sus elevados costos y dependencias externas, entonces también es una oportunidad que aparece ante esa situación vulnerable que empuja a muchos productores un poco a analizar o a ver alternativas productivas.
Por Nora Tamagno
Fotos: Agustín Barbera