Macri, sobreseído, pero no tanto

Macri, sobreseído, pero no tanto

2Ago22 0 Por Darío Balvidares

El fiscal José Luis Agüero Iturbe sorprendió contradiciendo sus propias argumentaciones anteriores al fallo de sobreseimiento de Mauricio Macri en la causa de espionaje ilegal a familiares del ARA San Juan.

El fiscal Agüero Iturbe desanda el camino que había pavimentado con las afirmaciones que empezaron a allanar la ruta al sobreseimiento (que ahora cuestiona), diciendo que “mantener abierta una investigación contra Mauricio Macri era socavar la figura presidencial y atentar contra la estructura republicana de gobierno”.

Lo que había dicho el fiscal (¿ahora “confundido”?) es una opinión del todo subjetiva, que tiene como efecto desviar el foco del porqué del procesamiento del expresidente Macri. En este caso la “figura presidencial”, atributo pasajero de quien la porta, se socava con acciones irregulares, impropias de quien provisoriamente la inviste, en este caso, el espionaje ilegal como práctica gubernamental.  

Recordemos que el 15 de julio, Mariano Llorens, Leopoldo Bruglia y Pablo Bertuzzi a cargo de la Sala I de la Cámara Federal porteña , concluyeron “…que no se cometió delito alguno en la producción de informes de inteligencia en los que se incluyó información de los familiares de las víctimas del submarino que se hundió en 2017” y afirmaron que “existe suficiencia probatoria para afirmar que las actividades desplegadas tuvieron como único objetivo la seguridad presidencial y/o la seguridad interior, y por esa razón se encuentran justificadas”.

Además de admitir que sí hubo inteligencia sobre los familiares de las víctimas del ARA San Juan, particularizan que las actividades desplegadas tuvieron como objetivo la seguridad presidencial, lo que nos lleva directamente a concluir que, para la AFI de Macri, los familiares de las víctimas del hundimiento constituyeron una amenaza cierta para la figura presidencial.

Macri se presentó ante ellos en la base naval de Mar del Plata vestido de jugador de golf, pues venía de esa tan acuciante actividad, a “escuchar” a quienes ya habían sido fotografiados, sufrido seguimientos, vulnerado sus redes sociales, intervenidos sus teléfonos, infiltrados por espías en sus reuniones y sujetos de los informes de la AFI. Todas esas acciones, para los jueces del tribunal de sobreseimiento, “se encuentran justificadas”.  

¿Qué lo hizo cambiar de opinión al fiscal Agüero Iturbe?

Probablemente algunas hipótesis del cambio de humor del fiscal, que había propiciado el sobreseimiento Mauricio Macri, se deban a que la compleja causa del hundimiento del submarino ARA San Juan es mirada internacionalmente y el fallo de la trilogía judicial naturaliza aún más los mecanismos utilizados, propios de la dictadura militar, que en este caso aparecen como sublimados por el protocolo que esgrime la impunidad.

El fiscal Iturbe afirma en su apelación a la Cámara de Casación que “una denuncia como esta debe ser investigada, respetándose todas las garantías constitucionales que amparan tanto a las víctimas como a los presuntos imputados y por eso, dictaminé como lo hice en anterior oportunidad, no obstante, las denuncias de esta gravedad institucional deben ser investigadas no importa que el denunciado se llame Juan, Pedro, Cristina o Mauricio.

Y es en este nuevo contexto argumental que le solicita a Casación Penal que anule el fallo del sobreseimiento, afirmando que los camaristas, Llorens, Bruglia y Bertuzzi no analizaron debidamente el avasallamiento de los derechos de las víctimas; los familiares espiados.

La querella mayoritaria, representada por la Dra. Valeria Carreras, impulsa una presentación ante la ONU y un recurso en la Cámara de Casación donde el fiscal presentó, ayer, su apelación para la anulación del sobreseimiento de Mauricio Macri.

La representante de la querella mayoritaria, quien había recusado al fiscal, cuando éste propiciaba el sobreseimiento en dicha causa, ayer manifestó, que “el fiscal apela el sobreseimiento masivo de los procesados pero también insta a seguir con la investigación, plantea la aberración de haber revictimizado a las víctimas de espionaje ilegal, cuestiona la legalización de las tareas de inteligencia montados sobre la equiparación de las víctimas a las de terroristas, justamente lo que más indignó a las familias”.

Por otra parte, la querella encabezada por Luis Tagliapietra, papa del oficial Alejandro Tagliapietra, víctima de hundimiento del submarino, presentó un pedido de juicio de remoción de los jueces, Llorens, Bertuzzi y Bruglia ante el Consejo de la Magistratura por “mal desempeño en sus funciones y posible participación en los delitos de violación de los deberes de funcionario público, cohecho agravado, negociaciones incompatibles con sus cargos y prevaricato”.

El juez federal de Dolores, Martín Bava, a quién le ordenaron trasladar la causa a Comodoro Py, había resuelto procesar tanto a Mauricio Macri, como a los entonces titulares de la AFI, Gustavo Arribas y Silvia Majdalani por encontrarlos “penalmente responsables del delito de realización de acciones de inteligencia prohibidas en carácter de autor, en virtud de haber posibilitado la producción de tareas de inteligencia ilegal, generado las condiciones para que se pudieran llevar a cabo, almacenado y utilizado datos sobre personas, por el solo hecho de sus acciones privadas, u opinión política, o de adhesión o pertenencia a organizaciones partidarias, sociales, sindicales o comunitarias, y por la actividad lícita que desarrollaban, así como en virtud de haber pretendido influir en la situación institucional y política del país…”, según había expuesto en su fallo.

Fallo que fue desestimado por la trilogía de sobreseimientos a la carta, que además reconocen que efectivamente hubo espionaje, aunque fue light; dos de los tres son los célebres autores de la teoría del “cuentapropismo”.

Tal vez, como dijo el por ahora ex procesado, “la verdad puede ganar en la Argentina”, pero estará del lado de las víctimas o no estará.

Darío Balvidares

Imagen destacada: Foto Darío Balvidares – Réplica del Sumarino ARA San Juan Puerto de Mar del Plata.