Alá fue más grande!

Alá fue más grande!

22Nov22 0 Por Tablón Argento

En un partido donde a la selección Argentina le anularon tres goles, Arabia Saudita se llevó una inesperada victoria. La selección nacional superó a su rival en el juego y en las oportunidades de anotar, pero no en los goles convertidos. El fútbol apasiona porque no es pura matemática, y esta vez el azar nos jugó en contra.

El partido arrancó muy favorable para la selección argentina con un rival que salió a defenderse. A los nueve minutos un penal infantil de los defensores sauditas, fue cobrado desde el VAR y Messi convirtió con solvencia.

Con el resultado en contra el técnico francés que dirige la selección saudita cambió el esquema y su equipo juntó las líneas, salió a presionar bien arriba y se defendió apelando al fuera de juego de los delanteros argentinos. En lo que quedó del primer tiempo Argentina le hizo tres goles, dos de ellos anulados desde el VAR y otro por un juez de línea. Quedaron muchas dudas con el segundo gol que le anularon a Lautaro Martínez, que partió habilitado y supuestamente le cobraron off side a Messi que no participó en la jugada.

El primer tiempo terminó con un resultado escaso para el equipo nacional, pero dejando la sensación de que si embocaba una más, el partido terminaba en goleada.

La selección saudí salió a disputar el resultado y en apenas 8 minutos dio vuelta el partido. El primer gol fue producto de una distracción de la defensa, en particular del Cuti Romero que dejó recibir al delantero Saleh-Al Sherhi y no pudo impedir su disparo. El segundo fue la culminación de una gran jugada de Al-Dawsari que se paseó por el área argentina, sin que ningún defensor se animara a tocarlo por miedo a hacerle penal y terminó con un tiro esquinado, muy lejos de las posibilidades de Dibu Martinez.

Cuando la sorpresa y el desorden parecía haberse apropiado del equipo nacional, el técnico Scaloni metió tres cambios intentando equilibrarlo y mejorar su poder ofensivo. Ingresaron Enzo Fernández por Paredes, Lisandro Martínez por Romero y Julián Alvarez por el Papu Gómez. Después, entró Acuña por Tagliafico. En lo que quedó del partido la selección argentina recuperó el dominio del juego y tuvo varias oportunidades para empatar el partido. No tuvo suerte.

Tratando de apelar al pensamiento crítico debemos reconocer que Arabia Saudita es un equipo aceptable, con buena disciplina táctica y dos delanteros peligrosos que nos dejaron recuerdos. Por el lado de Argentina, se mantuvo un nivel de juego y tuvieron una actuación destacada jugadores que normalmente están en el banco de los suplentes como Papu Gomez, Tagliafico y Enzo Fernández.

Messi, Lautaro Martínez, Otamendi y Nahuel Molina hicieron un buen partido, y en un escalón más abajo estuvieron De María y Paredes. Pareció apresurado el regreso de Cuti Romero, y lo más flojo fue lo de Rodrigo De Paul. Si se miran la estadísticas del partido, por tenencia, corners, y disparos al arco los números fueron muy favorables para la selección argentina.

Cuando se producen estos resultados no todos lo atribuyen a la suerte. Pára quienes creen en influencias religiosas es seguro que “Alá fue más grande”. Para quienes aseguran que la mufa mete la cola en el fútbol, la presencia en las tribunas de un ex-presidente argentino a quien se le atribuyen distintas desgracias, no pasó desapercibida.

El “que te dije” en el partido Argentina vs Arabia Saudita.