La Impunidad del poder parece no tener límites

La Impunidad del poder parece no tener límites

10Mar23 0 Por Alejandra Aristegui

En los primeros días de este mes de marzo de 2023, el fiscal Luis Humberto Piotti, titular de la UFI N°3 de Tandil, archiva la causa que investiga el crimen de Katherine Moscoso, quien fuera asesinada en Monte Hermoso en Mayo de 2015. La familia y las investigaciones indican que los asesinos y encubridores incluyen a personas vinculadas al poder político, a policías, bomberos, fiscales y funcionarios públicos.

Recorrido por la causa y la impunidad

 Katherine Moscoso fue enterrada viva y murió por asfixia. Escondieron su cuerpo durante 4 o 5 días, y lo hicieron aparecer en un médano el día 23 de Mayo de 2015. Pasados más de 7 años, con cientos de declaraciones de testigos y pruebas de sobra, hay una sola imputada, que era la mejor amiga de Katherine. Daiana Sánchez es incapaz de llevar adelante un crimen y un encubrimiento de tamaña magnitud, que involucra a fiscales, policías, funcionarios del gobierno, bomberos, y amigos del poder. El juicio para poder juzgar a los sospechosos hacia los que apuntan todas las pruebas desde el día 1, parece no llegar nunca.

 La familia de Katherine durante los primeros 4 años no pudo acceder a ver la causa que estaba radicada en Bahía Blanca, porque la mantenían como legajo reservado. En 2019 logran acceder y denuncian a 23 personas, entre ellos fiscales, ex instructores judiciales, comisarios, policías, bomberos, ex funcionarios y empleados municipales por la probable comisión de los delitos de Abuso de Autoridad e incumplimiento de los Deberes de Funcionario Público y Encubrimiento Agravado; sin perjuicio de formar parte todos ellos de una Asociación Ilícita, formada para ocultar pruebas, desviar la investigación, encubrir y proteger a los verdaderos culpables, presionar y amenazar testigos y policías.

Mediante la intervención del Procurador General de la Provincia de Buenos Aires se logra trasladar la causa del asesinato al departamento judicial de Azul. De allí pasa a Tandil. Tres años después el fiscal Piotti archiva la causa, en la cual se acumulan cada vez más pruebas y testimonios, que muestran todo un entramado de delitos: fiestas del poder que incluyen abusos a menores, distribución de drogas, otros asesinatos para cubrir a los verdaderos asesinos, represalias y amenazas a testigos.

 Cómo fue el asesinato de Katherine

La hipótesis de la querella es que Katherine Moscoso fue asesinada por personas vinculadas al  poder político de Monte Hermoso (PJ- Frente de Todos). Ellos tuvieron la posibilidad de encubrir el crimen, direccionar la investigación por medio de la policía de Monte Hermoso en los primeros tres días, direccionar y encubrir a los verdaderos culpables los días posteriores a través de la Policía Departamental (DDI), borrar la mayoría de las pruebas que pudieran incriminarlos, planificar el linchamiento de Canini Gonzalez a quien previamente se lo sindicó intencionalmente como sospechoso (y que da como resultado su muerte), incendiar la Comisaria y distintos lugares públicos (y sobre todo aquellos donde se encontraban imágenes que pudieran comprometerlos), amenazar a los inspectores de tránsito que pudieran haber visto algo en las cámaras durante la semana en que Kathy estuvo desaparecida, y direccionar en un primer momento la imputación hacia la amiga de la víctima (una chica con retraso mental, la única procesada en la causa y quien no tiene la capacidad para matar a Katherine, lavar el cuerpo, esconderlo y hacerlo aparecer).

Todo esto pudo ser ejecutado por una asociación ilícita, de policías, de funcionarios municipales, (entre ellos ex policías como Ricardo Triches, recordado por el caso de Natalia Melmann de Miramar, quien era Secretario de Seguridad de Monte Hermoso), y de Instructores y fiscales.

 Los pruebas colectadas permiten afirmar que Katherine Moscoso ingresó al boliche Arenas y conversó con Martin Fernández, dueño del boliche y hermano del intendente de Monte Hermoso, y con los patovicas Martin Iribarra, Pedro Rupell, y David  “Kun Kun” Tello. Estas 4 personas estuvieron con la víctima, y fueron para el Sauce  a una casa llamada La “Erica”, con la colaboración de Sergio “el pelado” Sánchez. Los nombrados mintieron cuando afirmaron no haber hablado con la víctima en el boliche, cuando varios testimonios dicen lo contrario, brindaron versiones contradictorias sobre muchos aspectos de la noche y de la semana posterior al hecho, y por sobre todo del conocimiento con el señor Sergio Sánchez, el “Pelado” del sauce, propietario del sitio donde se encontró ADN de la víctima, en unos palos de su patio y en su camioneta el dia Martes 26 de Mayo. Camioneta que fue incendiada intencionalmente, en el incendio de la Comisaría de Monte Hermoso, ocurrido horas después de que el cuerpo de la víctima fuera “plantado” por policías en complicidad con bomberos.

También se intentó direccionar la investigación y culpar del crimen de Kathy a Josué Gonzalez, quien fue encontrado ahorcado también en circunstancias que hacen muy dudosa la versión de que fue un suicidio.

Cómo sigue la lucha por verdad y justicia

Dados los múltiples y graves delitos, y la cantidad de personas involucradas, y el poder de muchas de ellas, se hace muy difícil lograr que el poder judicial actúe en pos de lograr verdad y justicia. Muchas personas fueron detenidas, juzgadas y condenadas por la pueblada y por el linchamiento de Canini González. Muchos testigos y personas que exigen justicia han sido perseguidos, amenazados y han sufrido represalias. Miembros de la propia familia y su abogado han sido denunciados. Todos intentos de amedrentar, infundir temor e impedir que se haga justicia.

Pero a contracorriente de lo que quieren los asesinos y encubridores, la lucha por justicia sigue y se  multiplica. En aquella pueblada de 2015 gran parte del pueblo salió a la calle indignado por lo que le hicieron a Kathy y con bronca acumulada porque se conocen bien los delitos de los gobernantes, de la policía y de los funcionarios del poder judicial; pero hay miedo de enfrentarlos. Durante los años que han ido pasando, la familia, su abogado y el grupo de Justicia por Kathy han sostenido una lucha que es como la de David contra Goliat.

En la actualidad se multiplican las personas y organizaciones que levantan la bandera de Kathy en distintos lugares del país. Los pasos legales a seguir incluyen nuevamente pedir la intervención del procurador y llegar a la Corte Interamericana de Derechos Humanos.

Es necesaria la participación popular para que se haga justicia y para que las personas implicadas no sigan gobernando, ni trabajando en las fuerzas “de seguridad”, ni en el poder judicial. Tamaño nivel de violencia y corrupción no pueden ser naturalizadas. Está en manos de todxs que esto no suceda nunca más.

Alejandra Aristegui