Francia: Macron aprobará por decreto la reforma previsional
17Mar23El intento de aumentar la edad para las jubilaciones ha generado fuertes movilizaciones de trabajadores en Francia. Macron pudo aprobar la reforma en el Senado, pero no contaba con los votos suficientes en la Cámara baja. Lo va a resolver con un decreto. El gobierno francés se quita la máscara republicana y agrava la confrontación con los sindicatos.
Siempre se ha presentado a Francia como el ejemplo de la República, del respeto por la división de poderes, pero es evidente que ese país no es una excepción en un momento de declinación de la vieja Europa. Y en esa decadencia, no solo se pierde autonomía política, sino también las formas.
Macrón ganó dos elecciones consecutivas con una propuesta de derecha, que se ofrecía como menos agresiva que la presentada por candidata ultraderechista Marine Le Pen. A semejanza de personajes locales que se presentan como más prolijos, como Horacio rodríguez Larreta, se esperaba que el gobierno de Macron no cruzaría ciertos límites. Volvió a demostrarse que, cuando se juegan fuertes intereses económicos, las palomas y los halcones se parecen.
La propuesta de reforma jubilatoria propone elevar de 62 a 64 años la edad de jubilación y amplía los años de cotización necesarios para obtener la pensión máxima.
Queda pendiente cual va a ser la respuesta de los trabajadores franceses a este nuevo atropello. Las movilizaciones en las semanas previas han sido muy importantes. Al principio alcanzaron a un millón de personas y después superaron los dos millones. Hubo concentraciones en la mayoría de las ciudades grandes y se plegaron gremios muy importantes, como el de ferroviarios y el de controladores aéreos. Las luchas contra la reforma se inscriben en un marco de descontento popular creciente porque los y las trabajadoras ven por un lado esfumarse los beneficios del Estado de bienestar, y por otro, un aumento de las partidas de gobierno destinados a armamentos. La suba de los precios de los alimentos y los combustibles, y la aparición de la inflación, una variable de ajuste desconocida para las jóvenes generaciones trabajadoras, alimentan un conflicto social que puede crecer en los próximos meses.