No murió Jorge Rulli

No murió Jorge Rulli

8May23 1 Por Alfredo Grande

Por tres razones, quizá más, no participé de la resistencia peronista. La edad, la oportunidad y seguramente la falta de coraje. Pero todo combate contra la cultura represora tiene para mi valor fundante. Seguramente nunca estaremos de acuerdo en que se encarna cada forma de la cultura represora. Pero lo fundante es si enfrentamos lo que entendemos por cultura represora o si por el contrario, de forma más o menos obscena, preferimos seguir durmiendo con el enemigo. Aunque eso implique terminar con pesadillas, no faltarán los psicofármacos y digestivos que permitan tragar sapos  y culebras.  No murió Jorge Rulli.  Por la razón, aunque no sé si sencilla, que las ideas no se matan, ni siquiera pueden secuestrarse y menos hacerlas desaparecer.  Y Rulli es, además de un compañero valiente que nunca podrá dejarnos, una idea.  Muchas ideas. Yo conocí a  Rulli hace relativamente poco.  Publiqué en la Agencia de Noticias Pelota de Trapo un artículo: “El macrismo, etapa superior del Kirchnerismo”  el 17 de diciembre de 2015. Sin conocerme Jorge Rulli comentó ese artículo en su  Canal de Reflexión Rural. Me sorprendió, porque no suelo ser demasiado citado. Me comuniqué con él para agradecerlo.  Y allí empezó una relación de notable franqueza  y mutua confianza. Obviamente, nunca le oculté que no era peronista, al menos que yo no me hubiera dado cuenta. Lo entrevistamos varias veces en el programa radial “Sueños Posibles” que conduzco junto a Irene Antinori.  Siempre generoso en su entrega intelectual y afectiva.  He escrito muchas veces que la idealización mata al ideal. Lo que lleva a pensar que el enamoramiento y el amor no solamente no son lo mismo, sino que son lo opuesto. En una de las tantas maneras del amor que existen, yo amaba y amo a Jorge Rulli.  Amo su entrega, su pasión, su coraje, su coherencia, consistencia, y para muchos, su credibilidad. No a pesar de pensar en muchas cosas en forma diferente, sino justamente por pensar en muchas cosas en forma diferente. Si bien pondero la unió, aborrezco la unidad. No tuve, tengo, tendré, unidad de ideas  y de acción con Jorge. Pero si tuve, tengo y tendré, unión en los que intentamos, luchar contra todas las formas de la cultura represora. Y Jorge Rulli fue  y es uno de las referencias que no deberían ser omitidas. La resistencia peronista, aun para los que no nos consideramos peronistas, es una de las tantas batallas contra una de las formas de la cultura represora.  Allí estuvo Jorge.  Y allí seguirá estando.