Lucas González: esta vez hubo Justicia
12Jul23La política del gatillo fácil, la discriminación racial y de clase quedan expuestas, cuando las balas policiales asesinan a un chico sin antecedentes policiales y que, como Lucas González venia de un entrenamiento de fútbol en el club del dirigente de la AFA. Por eso, hoy festejamos la condena de sus asesinos de uniforme.
Pero la impunidad con que actuaron los policías que le quitaron la vida y la trama de encubrimiento que montaron sus superiores, demuestran que este tipo de asesinatos es una práctica habitual, para quienes ejercen la violencia institucional fogoneados por discursos racistas y de desprecio a los pobres.
Los diálogos entre los comisarios que quedaron involucrados en el hecho son sugerentes. El comisario Ozan de la 4A de Patricios le avisa a Du Santos de la 4D de Barracas, que los oficiales de la brigada se mandaron “un mocazo”. También le sugiere que llame al jefe de la brigada, comisario Romero, para que emprolije “la cagada”. Después, aparece un arma de juguete, versiones falsas de los hechos, denuncias de aprietes a los subordinados para que no se conozca la verdad. Toda la trama de impunidad se pone en marcha.
Pero el caso de Lucas es diferente a otros. Tiene familiares y amigos que desde el primer momento se mueven reclamando justicia, es futbolista en un país donde, después del mundial, los futbolistas tienen mucho prestigio social, Barracas es el club del Presidente de la AFA, aparecen defendiendo a la familia abogados muy experimentados como Gregorio Dalbón, el crimen se produce en CABA e interviene la policía de Larreta candidato presidencial de la oposición de derecha y se hace presente en las Audiencias finales el secretario de Derechos Humanos de la Nación, Horacio Pietragalla.
Cómo no festejar la sentencia del Tribunal Oral en lo Criminal (TOC) N° 25, que condenó a prisión perpetua a los oficiales de la Policía porteña Gabriel Isassi, Fabián López y Juan José Nieva. Cómo no aprobar que también se condenó por encubrimiento del crimen a tres comisarios, un subcomisario y dos oficiales a penas de entre cuatro y ocho años de prisión. Cómo no aplaudir la calificación como “homicidio quintuplemente agravado”: por haber sido cometido con armas de fuego, abusando de las funciones de integrantes de las fuerzas policiales, con alevosía, con el concurso premeditado de dos o mas personas, y por odio racial.
Según el informe de la CORREPI durante 2022 en la Argentina se produjeron ochenta casos de gatillo fácil. Ochenta Lucas González, asesinados por las fuerzas de seguridad en solo un año, y en la mayoría de los casos fueron encubiertos por la institución policial. Son muy pocos los familiares que como la familia de Lucas, al menos tienen el alivio que los asesinos van a pagar sus crímenes con largos años de cárcel. Las recetas propuestas por personajes como Milei, Bullrich y Larreta, ya han demostrado sus consecuencias. Durante el gobierno de Macri, y con la aplicación del “protocolo Bullrich” estos delitos aumentaron.
Como si fuera una broma del destino, el día que asesinaron a Lucas, el 17 de noviembre, se festeja en CABA el día de la Policía de la Ciudad. La misma institución que cometió y pretendió encubrir el crimen.
Foto: Diario AR