Represión policial en Buenos Aires: asesinan al militante y periodista Facundo Molares
10Ago23El militante asesinado participaba de un acto no muy numeroso en el Obelisco, denunciando la farsa electoral, que fue violentamente reprimido por la policía de CABA. La acción policial le provocó la muerte. La disputa política en el interior de Juntos por el Cambio para ver quien aplica más mano dura, se cobró la muerte de un periodista que se había hecho muy conocido por haber sido detenido en Bolivia en ocasión del Golpe de Estado contra Evo Morales.
Hay un video esclarecedor que muestra cuando personal de la policía metropolitana reduce a Facundo Molares y lo presiona durante largos minutos contra el suelo hasta provocarle una situación de asfixia. También se escuchan voces que advierten que lo estaban matando. La escena nos hace recordar el asesinato del joven negro George Floyd, en Mineápolis, que derivó en una fuerte ola de protestas en Estados Unidos.
El contexto de este crimen es la carrera electoral en el interior de Juntos por el Cambio por demostrar a sus votantes, y a la embajada de Estados Unidos, que no les temblará el pulso cuando haya que reprimir la protestas sociales que provocaran los programas de ajuste pactados con el FMI.
La muerte de Facundo Molares no es la de un desconocido. Se trata de un reconocido militante popular internacionalista y comunicador social, que recorrió distintos países aportando a procesos de lucha y que como periodista fue detenido cuando cubría el golpe militar contra Evo Morales. Estando en Bolivia cuando se produjo la represión de los golpistas, recibió tres balazos y estuvo en coma. Después, el gobierno de Añez, lo sometió a una larga detención. De regreso en la Argentina, volvieron a detenerlo por un pedido de extradición de la justicia uribista de Colombia. El nuevo gobierno de Colombia, anuló la persecución contra su persona y ya en libertad volvió a ejercer la comunicación popular.
El colmo del cinismo, Patricia Bullrich, responsabilizó de su muerte a las organizaciones que llevan personas a las movilizaciones que no están en buenas condiciones físicas. El argumento de culpar a las víctimas cuando hay muertos en una represión, es un viejo argumento de la oligarquía. Cuando se produjeron los bombardeos de 1955 en Plaza de Mayo los gorilas acusaron a la CGT y a Perón de ser responsables de los fallecidos, incluidos los niños transportados en un omnibus escolar, porque convocaron a la movilización.
Quedará grabado en la memoria popular que el asesinato de Facundo Molares, que no pudieron realizar los fascistas uribistas de Colombia, ni los racistas golpistas de Bolivia, lo ejecutó Horacio Rodríguez Larreta y sus sicarios de la Policía Metropolitana. No estuvieron solos, contaron con la complicidad de quienes hoy quieren disfrazar su asesinato de “muerte por infarto”, “descompensación cardíaca que resultó fatal” , etc. Y también, con la de quienes quieren ensuciar su memoria.