El genocidio del estado de Israel al pueblo palestino
14Nov23En el marco del 36° Encuentro Plurinacional de Mujeres, Lesbianas, Travestis, Trans, Bisexuales, Intersexuales y No Binaries, dialogamos con Maren Mantovani, integrante del Secretariado Internacional del Comité Nacional Palestino de Boicot, Desinversión y Sanciones, quien se desempeña también como coordinadora de relaciones internacionales de la Campaña Palestina contra el Muro del Apartheid y asesora internacional de la Coalición para la Defensa de la Tierra, la Red de Movimientos sociales palestinos.
Contrahegemoníaweb y Tramas (Ch yT) – ¿Nos podrías referir cuál es tu relación con la causa de Palestina y en qué consisten las campañas que desarrollan?
Maren Mantovani (M.M.) – Hace 20 años atrás me encontré con la causa Palestina y ahí empecé a luchar como responsable por las relaciones internacionales de la Campaña contra el muro, que es el movimiento popular que se construyó en el 2002 basado en los comités populares que están hasta hoy en la resistencia, en la lucha, contra el muro del apartheid. Es decir, el proyecto de encarcelamiento de la población palestina en Cisjordania, en sus aldeas, en sus comunidades, para literalmente “limpiar” étnicamente los territorios de la Cisjordania.
En el 2005 cuando en Palestina se lanza el llamado por el boicot, desinversión y sanciones que fundamentalmente fue una construcción colectiva de toda la sociedad civil palestina, todos los movimientos sindicales, políticos, sociales, que se unieran y dijeran nos queremos dar una visión, una metodología para la solidaridad internacional que pueda visibilizar y mostrar la responsabilidad de Israel por sus crímenes, y que pueda acabar con la complicidad internacional frente a todo lo que Israel está haciendo al pueblo palestino. Ahí surge el comité internacional por boicot, desinversión y sanción (BDS) de la cual formo parte del secretariado internacional.
Ch y T – No podemos analizar lo que está ocurriendo hoy en Gaza sin una mirada histórica que reconstruya los años de lucha que el pueblo palestino viene atravesando…
M.M.- Creo que es fundamental colocar lo que está pasando ahora, no como algo que empezó hace dos semanas atrás, ni como algo que es el resultado de una lucha atávica, que no puede tener resolución. Sí puede tener resolución. Porque tiene un inicio muy claro que fue en 1948, con sus antecedentes por supuesto y construcción anterior, pero es en 1948 cuando Israel se construye sobre el 63 por ciento del territorio palestino; limpiando étnicamente de sus casas, de sus ciudades, de sus pueblos a más del 80 por ciento de la población palestina que había vivido hasta entonces en esos territorios.
Se construye como un proyecto colonial, fundamentalmente porque Palestina está en una zona geoestratégicamente central en el cruce entre África, Asia y Europa, en el momento en el cual el imperio británico que tenía ocupado desde entonces la Palestina, “entiende” que la “descolonización”, como en India y otros lugares, era una necesidad. Ahí llega esa idea sionista que vendiera el proyecto británico “vamos a ser el baluarte del Occidente contra la barbarie del Oriente”, esto significa fundamentalmente hacer una base militar en el corazón del mundo árabe.
Del apartheid y delitos de lesa humanidad al genocidio planificado
M.M. – Así se construye Israel como un proyecto colonial sobre la limpieza étnica del pueblo palestino. De hecho, cuando hoy hablamos de la población de Gaza, de los 2.5 millones de personas, la gran mayoría son refugiados, 85% de la población son refugiados desde esa época en esa pequeña franja de Gaza.
Y se construye como un proyecto colonial adoptando un sistema político de apartheid exactamente como en el Sudáfrica. En ese mismo año, en 1948, los blancos construyen el sistema político del apartheid donde pocos blancos tienen todo, y reprimen, oprimen y explotan a los y las no blancas.
Este sistema de apartheid fue definido por la comunidad internacional como un crimen de lesa humanidad, llevando el racismo a la categoría de un crimen de lesa humanidad, y ese sistema que fue derrotado principalmente por la lucha del pueblo de Sudáfrica, sumó el apoyo internacional y los boicots de desinversión y sanciones. Por eso, si en Palestina también hay un apartheid, entonces consideramos que también en Palestina era necesario un movimiento global BDS. De hecho, las compañeras de Sudáfrica cuando llegan a Palestina dicen “esto no sólo es apartheid, sino que es peor de lo que sufrimos nosotras, porque al menos no nos caían las bombas”.
Entonces, este sistema colonialista de apartheid y pues evidentemente de ocupación militar de la franja de Gaza, de la Cisjordania, que después en el 1967 acontece cuando Israel toma todo el resto de lo que fue la Palestina histórica, de hecho, en este momento la población palestina tiene acceso solamente al 13% de sus territorios históricos.
Entonces ahí hay un proceso de continua limpieza étnica, un proceso de lesa humanidad, por lo tanto, de una población indígena palestina por parte de un poder colonial, supremacista, racista que es el estado de Israel.
Lo que hasta ayer o hasta hace unas semanas atrás no dijimos, pero pienso que hoy es absolutamente indiscutible, de hecho los mayores expertos legales internacionalmente que hasta ayer estudiaban los genocidios del holocausto de Ruanda, de Armenia, y otros, se están juntando y diciendo que lo que Israel está haciendo en este momento en Gaza no solo es una ocupación militar, no es solamente el enésimo crimen de guerra, no solamente es expresión de lesa humanidad de apartheid, este es un ejemplo de genocidio planificado y ejecutado en este momento.
De hecho, lo que es el bombardeo hoy en la situación de Gaza empieza, bueno tiene una historia más larga que quizás podamos abordar también, pero comienza cuando el domingo de semanas atrás el Ministro de guerra israelí dice ”yo he ordenado cortar la luz, el envío de alimentos y el agua y he ordenado los bombarderos porque no reconocemos a la población de Gaza como animales humanos, y actuamos en consecuencia” en sus palabras. Esas fueron las palabras del ministro de guerra.
Ch y T- La frase completa es absolutamente infrahumana.
M.M.- Es el infrahumano, no definimos a estas personas como animales humanos. Y hay varias otras declaraciones de Netanyahu, el primer ministro, que van en esa misma línea, como cuando declaró la “destrucción completa de la población de Gaza”.
Y es lo que está pasando en este momento, estamos en una situación mucho más grave aún de las masacres que hemos vivido estos años. Porque otra cosa que hay que entender es que esta franja de Gaza, donde los despojados están desde hace 75 años, desde hace ya 15 años está totalmente bloqueada, sitiada, no entra ni sale nada que Israel no permita. Hay otro viceministro de guerra israelí que hace unos años atrás decía “ponemos al pueblo en Gaza en una dieta y calculamos las calorías que necesitan ellos”. Imagina que el otro no tiene nada, es sencillamente una manera de mantener a una población al margen de la sobrevivencia. Así esta situación desde hace 15 años con bombarderos en masa cada dos o tres años, destrucción de toda la infraestructura, matanzas de 500 personas, de 2000 personas.
Entonces, esto que se vive hoy es prácticamente una construcción de 75 años, luego 15 años de escalada de violencia, hasta que hoy estamos a un nivel que nadie puede negar que lo que Israel está haciendo es un genocidio sobre la población.
En este momento la Organización Mundial de la Salud dice que se acaban ya las últimas raciones de agua y de comida mientras las bombas todavía caen. En los primeros días Israel ha lanzado sobre esta pequeña franja que es de 10km de largo más de 6000 bombas, esto es más que todas las bombas que lanzó EEUU en Afganistán en un año, es un infierno en Gaza. Y las personas literalmente no saben cómo moverse, morir bajo las bombas, morir por el hambre o morir por la sed.
Las complicidades con el estado genocida
Ch y T – Podemos decir que Israel no está solo en este despojo permanente al pueblo palestino…
M.M. – En esta situación, evidentemente Israel es el primer culpable. Pero quien también es igualmente culpable es quien ha permitido por 75 años la impunidad de Israel en cualquier cosa que estén haciendo durante todos estos años, y sobre todo quienes hoy en este momento están permitiendo todavía la impunidad de Israel e incentivando lo que Israel está haciendo.
En primer lugar, los EEUU que manda en todo momento armas a Israel para que Israel pueda seguir bombardeando y al mismo tiempo se está oponiendo en el Consejo de Seguridad a cualquier moción o resolución que pide algo simple: “Cesen el fuego”.
En este momento tenemos un Consejo de Seguridad bloqueado que no puede decir “cesen el fuego” en el momento en que se está llevando adelante un genocidio. Evidentemente el gobierno de Inglaterra no es mejor que otros pero no son solamente los que están ahí, en el Consejo de Seguridad. Es también por ejemplo aquí, el gobierno argentino que no dice nada, no está haciendo nada, no está pidiendo un cese el fuego. ¿Cuántas personas tienen que morir? Ahora ya son 3.000 personas que han muerto. ¿Cuántas bombas tienen que caer? ¿Cuántas semanas y días estas personas tienen que estar sin comida ni agua hasta que alguien dice “basta”?
En el tema de la impunidad tenemos que poner un poco el dedo también en las responsabilidades de los gobiernos de América Latina en las últimas décadas en lo que está pasando. América Latina fue uno de los continentes donde más armas ha vendido Israel. Porque una cosa que no se puede olvidar es que EEUU arma a Israel, pero Israel tiene una economía de guerra que prácticamente se mantiene sobre la producción de armas y la llamada tecnología de seguridad, de espionaje y varios. Esta tecnología ellos la tienen que vender, sino su economía de apartheid no es financieramente sustentable, y quien compra es el sur, América Latina, India y ahora África. Israel es el quinto productor de armas y de armas de espionaje como el famoso software que nos espía desde nuestros celulares. Esta producción de armas se vende desde hace décadas y sistemáticamente a América Latina. No hay un gobierno autoritario, antidemocrático, no hay una dictadura, o un genocidio en América Latina que no haya sido provisto de armas por Israel. Por eso aquello de que las balas que matan al pueblo palestino, matan también al pueblo de América Latina. Pero también el dinero de América Latina está financiando la industria de la guerra y las bombas que caen en Gaza. Esta relación con la complicidad pero del otro lado de la victimización no solamente del pueblo palestino sino de los pueblos aquí. Al mismo tiempo el Mercosur que en el 2010 ha firmado un tratado de Libre Comercio con Israel, que continúa manteniendo estas relaciones preferenciales de comercio con Israel, como que Israel no hubiera hecho nada a nadie. Hay una serie de estas complicidades, como que también que justo ahora cuando se dieron una serie de victorias de gobiernos más progresistas en Chile, en Colombia, en Brasil, Israel intentó limpiarse la cara de la imagen de vendedor de armas con la idea de vender “la tecnología que ha hecho florecer el desierto”.
Bueno, la tecnología israelí no ha hecho florecer el desierto, la única cosa que ha hecho es robar el agua al pueblo palestino, para usar este agua para su propia colonización de las tierras “limpiadas” étnicamente.
Y con esta movida de propaganda del apartheid israelí, entró una de las empresas estatales israelíes fundamentales para sus políticas que es la Mekorot, empresa estatal del agua construida con la construcción del Estado israelí, para garantizar el agua que sirvió para la colonización de Palestina y para transformar este agua en un arma. Porque sistemáticamente la población palestina que tiene que ser limpiada étnicamente, no recibe más acceso al agua, así como garantiza el agronegocio israelí. Como también sucede hoy que la población de Gaza no tiene más agua, para poder garantizar este genocidio que está en acto.
Esta empresa está entrando en la Argentina particularmente, pero también en otros países de América Latina con un sistema de contratos de consultorías “ayudando” a los estados de las provincias en Argentina, ya alrededor de diez provincias, para construir planes maestros para el agua.
Cuando descubrimos esto, las compañeras aquí han lanzado la campaña “Fuera Mekorot”, diciendo no puede ser que de un lado nosotros financiamos con nuestro dinero la continuidad del apartheid de Palestina por parte de una empresa que no por acaso está liderado no por alguien que sabe algo del agua, sino por un militar israelí que sabe todo sobre represión y cómo el agua es fundamental en el desplazamiento de la limpieza étnica de las comunidades.
Esta empresa llega ahora aquí a la Argentina para “ayudar” a las provincias argentinas, para construir planes maestros, esto evidentemente son planes hechos por los “maestros”, las grandes mineras y lo que sea, definitivamente no van a ser planes de los pueblos para los pueblos de la Argentina. De hecho, las asambleas del agua ya han movilizado junto a los movimientos de solidaridad con Palestina, diciendo no, fuera Mekorot, esta empresa que por ahora hace la consultoría, estos planes maestros, no va a ser bueno para el pueblo argentino, no van a ser planes que ven el agua como bien común. En ese sentido esta lucha “Fuera Mekorot” no solo es fundamental para el pueblo palestino sino también para el pueblo argentino.
Pero lo que hoy, y en este momento todavía más, nos sirve es que este pueblo sobreviva, que mañana por lo menos tenga el agua que necesita para poder seguir su lucha. Si no paramos este genocidio, si no convencemos a estos gobiernos y logramos que cese el fuego, que acaben con la matanza, mañana no vamos a tener con quién luchar. Pienso que hoy tenemos una necesidad absoluta para decir Cese el fuego ahora. Mañana vamos a seguir luchando contra Mekorot en Argentina y en América Latina, mañana vamos a seguir luchando contra las relaciones militares y responsabilizar a Israel por sus crímenes de guerra y lesa humanidad.
Ch y T-¿Algo que quieras agregar?
Hablé de muchas cosas que son dolorosas, “todo lo que está mal” como dicen ustedes, pero no nos tenemos que olvidar de aquellas cosas que están bien. Cosas que logramos, que nos dan la fuerza y la esperanza para continuar la lucha. Hoy por lo menos tenemos un gobierno en América Latina, en Colombia, donde su presidente no solamente ha dicho “Colombia no apoya a los genocidios”, y ojalá Argentina en algún momento diga lo mismo, sino que hace justo unas horas atrás ha dado la orden de expulsar al embajador israelí en Colombia. Motivando esto no solo una posición ética sobre el genocidio en Palestina, sino recordando lo que significa el aporte a Colombia entrenando a los paramilitares que por décadas han matado ni sé cuántos millares de personas en Colombia, y desplazado a muchos más todavía. Recordando que los israelíes han construido los planes de genocidio, sociocidio y la destrucción de los intentos de planes de paz hace muchos años atrás en Colombia. Entonces, esto es señal de que sí se puede, solo se trata de voluntad política, se podría también en Argentina.
Pienso también que en Argentina sí se puede, porque la historia de Mekorot en Argentina no es nueva, ya en el año 2010 Mekorot intentó entrar por primera vez en la Argentina y fue justamente en La Plata. Cuando el entonces gobernador Scioli lanzó una licitación por una planta de potabilización en La Plata, justo desde las oficinas de la Mekorot en Tel Aviv. Luego que ganó la licitación, se lanzó la campaña “Buenos Aires, Aguas Turbias” al principio con el mensaje “no tenemos que financiar una empresa del apartheid del agua”. Pero muy rápidamente se descubrió un poco más de los planes de esta planta de potabilización y las compañeras de los sindicatos en La Plata descubrieron que esta planta no solamente tendría que incrementar el precio del agua por tres veces por sobre el precio del agua que tenía en esa época, sino que ese agua potable sería para los barrios ricos con una infraestructura de calidad en los caños, mientras que los barrios populares no tendrían esa calidad para poder tener agua potable. Y finalmente se logró una victoria, luego de cuatro años de lucha se logró cancelar ese contrato. No fue solamente una victoria por el pueblo palestino, sino también para el pueblo argentino que evitó que la Mekorot perjudicara también por aquí. Por eso tengo esperanza que también esta vez logremos acabar con estos contratos de consultoría de la Mekorot. Para poder lograr una gestión democrática del agua, o al menos una gestión más democrática que en Palestina.
Acciones por Palestina
Ch y T – ¿Qué acciones de apoyo a Palestina se desarrollarán próximamente desde la agenda internacional de los movimientos?
M.M. – Evidentemente en este momento el llamado de solidaridad, el grito de Palestina, es por movilizarse ya, movilizarse en los medios alternativos, detener este genocidio es la prioridad de este momento, pero pensando en la responsabilidad de Israel en sus crímenes, porque sino se piensa como otra masacre más, y esta tiene que ser la última, una solución de libertad, justicia y paz para el pueblo palestino, para eso es necesario continuar difundiendo para que se conozca lo que es Israel, que no es una democracia, es el régimen de apartheid que utiliza el genocidio como una herramienta. Las Naciones Unidas ya tienen una herramienta que fue fundamental para la lucha contra el apartheid, hace años estamos pidiendo que se reactive este comité para tratar nuevamente el apartheid, en este caso de Israel contra el pueblo palestino, y esta es una demanda fundamental que tenemos. Ahora, evidentemente también todo el mes de noviembre es un mes de solidaridad con Palestina. Desde el 9 de noviembre llega desde Palestina el llamado por un mundo sin muros, y este año un mundo sin muros del patriarcado, construyendo las luchas en conjunto con las mujeres de todo el mundo, porque son las mujeres las que siempre están en la resistencia, en las luchas, no son las más visibles pero son las más fundamentales para sostener las resistencias, las luchas de un pueblo. El 29 de noviembre que es el día internacional por Palestina, que este año va a ser un día internacional de unidad contra el apartheid israelí, y también este va a ser un momento de movilización global fortísimo. Entonces, pienso que desde ahora hasta fin de año hay una serie de acciones para desarrollar, para fortalecer, para que los próximos años no simplemente asistamos a la continua masacre y opresión del pueblo palestino sino para que se logre responsabilizar a Israel de sus actos y ayudar a construir la liberación del pueblo palestino.