Trastornos del Espectro Fascista
15Nov23En estos últimos años, la psiquiatría, en un intento de aggiornamento de la mano de las corporaciones de laboratorios y farmacéuticas, dejó de hablar de enfermedades por el más amigable de trastornos. Ya no se habla de autismo sino de trastornos del espectro autista.
Los médicos y las escuelas usan el término trastorno del espectro autista (TEA), a una persona con autismo. Las personas que lo tienen pueden llamarse a sí mismas autistas.
Tengo pocas adicciones y no estoy orgulloso de eso. Pero una que mantengo es la compulsión por las analogías. Como decía el humorista Cesar Bruto, en la sopa más repugnante siempre hay algo de nutritivo. Y como la afirmación más contundente en la actualidad de nuestra cultura electoral es “no son lo mismo”, no vengo a traer mi corazón, sino algo de mi razón tan golpeada. Y, finalmente, encontré a mi humilde criterio, el núcleo de verdad de esa contundente frase: “no son lo mismo”. Siempre dije que el problema es establecer cuál es la diferencia. Y a mi criterio la diferencia es que ocupan rangos diferentes en los Trastornos del Espectro Fascista. Lo cual obliga a cierta precisión conceptual sobre qué entendemos hoy por fascismo. Para lo cual debo auto referenciarme. En artículos publicados en la Agencia de Noticias Pelota de Trapo cuando el ingeniero de la triste figura Mauricio Macri fue elegido por primera vez Jefe de Gobierno de la Ciudad de Buenos Aires acuñé el concepto de “fascismo de consorcio”. La condición de fascista de Macri siempre fue discutible, y esa duda fatal nos regaló años despues la presidencia del ingeniero. En ese momento era “de consorcio” por el énfasis vecinalista de su gestión. El sujeto político en esos tiempos era el buen vecino. Sin embargo, cuando la banda armada cuya identidad autopercibida es policía de la ciudad, entró a los balazos en el Hospital Borda, fui más explícito y en un acto lo califiqué de fascista. https://www.youtube.com/watch?v=eZLu_BlqtpI&t=3s
A pesar de eso, recuerdo que un destacado periodista especialista en política internacional, afirmó en un acto en la CTA que en la Argentina no había fascismo. En una no tan lejana época se decía que un fascista era un liberal asustado. Ahora diría que tambien puede ser un liberal contrariado, o un liberal liberado de la hipocresía política habitual. Si por fascismo solo referenciamos con el fascismo de Mussolini o Hitler, creo que nos perdemos las sutilezas que la cultura represora tiene para negar su condición de represora.
Pienso que el que mucho abarca mucho aprieta. Yo defino como fascista toda política en la cual una minoría poderosa somete y aniquila a una mayoría desamparada. Esa minoría poderosa se organiza en múltiples formatos. Siendo el democrático el más encubridor y la dictadura el más letal. A mi criterio los Trastornos del Espectro Fascista incluyen desde las derechas liberales hasta las derechas pornográficas. Por ejemplo: el incondicional apoyo al terrorismo del Estado Israelí, la sumisión al Fondo Monetario Internacional, el permanente lameteo a las políticas del capitalismo criminal de Estados Unidos.
A mi criterio, en la primera vuelta con la única excepción de la candidata del Frente de Izquierda de los Trabajadores, eran 4 representantes del Trastorno del Espectro Fascista. En el balotaje son 2. Dentro de ese Espectro, hay trastornos más repugnantes que otros. Al menos para mí, eso es indudable, Y es la base de la estrategia del “voto espanto”. La liturgia del “no soy bueno, pero soy menos malo”. Irónicamente, sería como decir que cuando la dictadura asesinaba y torturaba hasta se extrañaba a la triple A. El Trastorno del Espectro Fascista abarca demasiado, pero me parece más útil que denominar fascista sólo a los pescados y pescadas que por la boca matan. Pensar en términos de Trastorno del Espectro Fascista es más operativo que, por ejemplo, psiquiatrizar la política. No bastaba judicializadarla. Ahora vuelve la práctica nefasta de confundir locura con psicosis. Un colega escribió: Su diagnóstico psiquiátrico es Trastorno delirante tipo persecutorio (los antiguos lo llamaban “locura razonadas o F22.0 DSM IV). Obviamente se refería a Milei (la Bestia) aunque escuchar las declaraciones actuales del Bello y compararlas con las de hace algunos años atrás, no garantiza demasiada coherencia mental. Pero si una formidable capacidad de manipulación, apenas emulada por sociópatas seriales. El resultado: el Partido Renovador termina siendo hegemonía en el Frente/Unión por la Patria.. Creo que el roto encontró a su descosido y la siniestra pareja ocupa el centro de la escena. Estuvieron dándose piquitos en el debate por el tema seguridad. Enormes elogios a la tolerancia cero. Pero por omisión, tolerancia infinita hacia el crimen del hambre.
Los Trastornos del Espectro Fascista dominan la economía, la política, la cultura. Tenemos dos años al menos para que la lucha de las izquierdas que luchen contra el capitalismo y no entre ellas, puedan parir mujeres nuevas y hombres nuevos, para que el mito del ascenso social sea desalojado por la convicción del poder político desde y para la clase trabajadora.
En el mientras tanto, el domingo se vota. Y sé que no son lo mismo. Son muchas y muchos que votarán a lo que consideran lo menos fascista dentro de los Trastornos del Espectro Fascista. ¿Voto táctico? Quizá. En caso que esto fracase, la culpa no la tendrán los que se abstienen. La culpa histórica la tienen las y los que crearon las condiciones para que la Bestia haya crecido de una manera tan “sorprendente”. Ya pasó con Macri. Y en cierta medida, aunque el camuflaje fue mejor con Alberto Fernández. No creo que la tercera sea la vencida, porque el Trastorno del Espectro Fascista nunca se acaba. Al menos en forma espontánea.
Y parodiando una célebre frase de Salvador Dalí refiriéndose a Picasso (la diferencia entre Picasso y yo es que él es comunista y yo tampoco) diría que la diferencia es que Massa es democrático y Milei tampoco. Pero en algún lugar del Trastorno del Espectro Fascista están los dos.
El voto será tambien una cuestión de gustos personales y de lavarse de culpas y posibles reproches.
el humor y la crítica para resistir. Gracias
Para mí no sólo no son lo mismo estos dos fachistas, sino que uno es medio moderado y el otro es extremo.
Uno pondría armas en manos de irresponsables. hasta motosierras.
Pero sería capaz de entregar Malvinas con el aplauso de Macri y Bulrich.
Ahora confirmó que miente cuando está diciendo lo contrario de lo que había dicho antes en la misma campaña.
Es lo mismo que con anteriores pro mesas de pobreza cero.
MUY SUGERENTE. !